Esta semana ha sido bastante intensa y estuve inmerso en el trabajo con proyectos que me han motivado bastante. El lunes ultimé el vídeo del calendario que había terminado la semana pasada, dándole unos retoques finales, para pasar a un nuevo proyecto. Preparar un vídeo para la inauguración de un bar que se llama Orpheo, con el cual estuve toda la semana.

El encargo audiovisual venía dividido en dos partes, una página de periódico, de la que no me encargaba, y otra pieza basada en una secuencia de imágenes de ojos para terminar mostrando la nueva marca, que es justo donde entraba yo. Empecé buscando imágenes de referencia y montando una buena selección. Después pasé a retocarlas con Photoshop, dándoles un mismo estilo tipo impresión con líneas horizontales, bastante gráfico. Cuando ya tenía el material listo, me puse con el montaje en Premiere, dándole ritmo y forma al vídeo. A lo largo de los días fui ajustando detalles, transiciones, efectos… y la verdad es que fue un proceso bastante creativo, que para cuando llego el viernes estaba bastante finalizado.

Fuera del trabajo, la semana estuvo cargada de cosas buenas. Empezamos la semana yendo a Camada, un restaurante especializado en Francesinha que estuvo muy bueno. Aparte, me animé a cocinar cosas más elaboradas en casa y la verdad es que me superé un poco, preparé garbanzos y unos macarrones a la carbonara, que me salieron de lujo dicho por mis compañeros de trabajo, porque llevé comida al estudio para compartir. Otro día, estuve explorando la ciudad, subiéndome a la línea 207 del bus, la que va hasta la playa, y me hice el recorrido entero solo por curiosidad. Que a los días descubrí que tiene una cuenta de Instagram con memes, siendo un dato que me hizo bastante gracia.

También fui al gimnasio varios días para mantener el ritmo, y participé por primera vez en un intercambio de idiomas en el jardín de la residencia. Fue genial y me ayudó mucho a soltarme con el inglés y conocer gente nueva, de hecho, acabé saliendo con ese grupo el viernes por la noche. Estando en una terraza bar con DJ encima del centro comercial de Vía Catarina y después nos fuimos de bares por la calle Dos Oliveiras, donde terminamos cenando todos pizza.

El fin de semana siguió con buen ambiente. El sábado por la mañana me lo tomé con calma, un poco de ejercicio y limpieza, para por la tarde irme al Festival Continente en Matosinhos, donde disfruté de comida callejera, hamburguesa con patatas, y música brasileña en directo, de los cuales el artista más potente de la noche fue MC Kevinho.


Y el domingo fue ilusionante, me levanté tarde, paseé un rato relajado por el jardín y luego fui a una barbacoa a la que me habían invitado unos brasileños que conocí en la residencia. Todo de manera muy informal, con carne americana y cerveza Super Bock, siendo una forma perfecta para cerrar la semana con buen rollo.

Esta semana próxima tenemos un nuevo reto, cada uno de nosotros llevaremos al estudio un plato típico de nuestro país para compartir. ¡SE VIENE SEMANA ASOMBROSA!